Numerosos tipos de hierba contienen fructanos, un tipo de hidrato de carbono. Los niveles de fructanos en la hierba son más altos cuando los días son soleados y las noches frescas. Como parte de la gestión de sus caballos, los propietarios deben ser conscientes del contenido de fructanos de sus pastos. A continuación veremos por qué.
La capacidad del caballo para digerir los fructanos es limitada. Es posible que se produzca una mala fermentación en el intestino posterior si el caballo consume más fructanos de los que puede digerir.
Malfermentación es un término utilizado para describir el proceso por el cual los fructanos o almidones no digeridos fermentan en el intestino posterior de un caballo. Este proceso produce ácido láctico y otros subproductos que pueden ser tóxicos para los caballos.
Un análisis del microbioma del caballo mostraría probablemente un aumento del número de bacterias productoras de ácido láctico y una disminución de otras bacterias beneficiosas, que son fundamentales para mantener un sistema digestivo sano. Este cambio en el microbioma puede provocar una serie de problemas digestivos, como molestias abdominales, pérdida de peso, cambios en el apetito y disminución del rendimiento. Si esta situación persiste, pueden producirse graves consecuencias para la salud.
Los propietarios de caballos pueden tomar algunas medidas para evitarlo:
- Puede vigilar la dieta de su caballo y limitar su acceso a la hierba con alto contenido en fructosa mediante estrategias de gestión de los pastos, como la rotación de pastos.
- Asegúrese de que su caballo tiene acceso a agua limpia y fresca
- Los cambios en la dieta y el régimen de ejercicio de su caballo también deben vigilarse de cerca porque pueden afectar al sistema digestivo y aumentar la posibilidad de malfermentación.
- Además de estas técnicas de gestión, existen suplementos y aditivos alimentarios que pueden ayudar al sistema digestivo del caballo. Un ejemplo es EquiNectar, que contiene fructanasa, una enzima que descompone los fructanos y facilita su digestión.
- Por último, dado que los problemas digestivos pueden afectar a la salud general, es fundamental vigilar la salud del caballo de forma proactiva. Para detectar posibles problemas a tiempo y tomar medidas inmediatas, realice revisiones periódicas y esté atento a cualquier cambio de comportamiento o apetito.
